
La solicitud, dirigida al intendente Santiago Tizón, exige el desvío del cauce y la construcción de una defensa de hormigón en los márgenes del río para evitar mayores daños.


El desborde del río ha provocado la pérdida de terrenos cercanos al cementerio, donde descansan familiares y seres queridos de los habitantes del pueblo. La falta de obras en este espacio agrava la preocupación, ya que se trata de un lugar de gran valor sentimental y cultural. Además, la erosión ha afectado sectores utilizados para el esparcimiento, como la cancha que los vecinos frecuentan los fines de semana.

