
El anuncio cayó como baldazo de nafta fría: el ajuste coincide con el Día del Amigo, una de las fechas más movilizantes del calendario, donde el movimiento en rutas, bares y parrillas está garantizado.
Según la empresa, el ajuste responde al aumento del precio internacional del crudo y se enmarca en su flamante política de «precios dinámicos», una estrategia que permite hacer microajustes según la franja horaria, la región y la demanda. Sí, leíste bien: ahora los precios pueden cambiar a cualquier hora del día y en cualquier punto del país.
¿La clave de esta nueva modalidad? El Centro de Monitoreo en Tiempo Real (RTIC), un sistema que permite seguir minuto a minuto las ventas y activar ajustes con agilidad quirúrgica. «Tecnología al servicio del bolsillo… del Estado», ironizan ya en las redes.
El aumento llega en un contexto de inflación sostenida, pérdida del poder adquisitivo y fuerte tensión en el mercado energético. Mientras tanto, las familias siguen recalculando sus gastos, y cada visita a la estación de servicio se vuelve un golpe al presupuesto.
YPF avisó que esto no termina acá: seguirán evaluando el mercado para futuros aumentos.
En resumen: este Día del Amigo, YPF te pone la mano en el hombro… y la otra en el bolsillo.