La polémica empresa en cuestión es Tech Security, fundada hace casi 20 años por Martín Menem y sus hermanos, Fernando Nicolás y Eduardo Adrián Menem. Esta firma, especializada en seguridad privada, acaba de quedarse con una preadjudicación multimillonaria para custodiar varias sedes del Banco Nación.
El monto del contrato es escandaloso: $3.933.026.507,98
(¡más de tres millones de dólares al valor oficial!).
Un negocio que genera más de una sospecha y deja en evidencia la cercanía entre el poder político y el beneficio privado.
“Hay una incompatibilidad absoluta en que la familia Menem pueda brindar un servicio de seguridad al Banco Nación. Vamos a denunciar este caso”, disparó Castagneto con dureza.
La jugada ya levantó polvareda en la arena política, y muchos se preguntan si Menem utilizó su posición como presidente de la Cámara para favorecer a su propio clan familiar.
Mientras tanto, desde el oficialismo guardan silencio, y en redes ya hablan de «el nuevo Menemismo empresarial».
¿Transparencia o negociado encubierto?
Otra vez, los nombres de siempre, las empresas de siempre, y el Estado como caja.
