Escuelita Centenaria por Beatriz Ochoa
Hoy vienen a mi encuentro
recuerdos de aquellos tiempos,
de esa vieja escuelita
que nació allá por mil novecientos.
Ya me parece escuchar
el tan-tan de su campana
y el suave viento que pasa
al flamear la insignia patria.
El molino es su vigía,
unos álamos la cuidan,
un hornito da calor
a sus niños todo el día.
Su tejado, tan gastado,
va perdiendo su color;
en su patio está dibujado
algún lindo corazón.
Por eso, en estas líneas,
mis respetos yo te dejo;
en lo blanco de esas aulas
hay pureza y mucho amor.
Escuelita centenaria,
tu recuerdo es mi tesón;
me enseñaste en la infancia
que ser cultos es un honor.
Dedicatoria:
A la Escuela N.º 235, provincia de Chubut, en mi pueblo Yala, y a los maestros que no solo me enseñaron a leer y escribir, sino también valores como el respeto y la moral, que nos hacen personas de bien. Mis respetos y agradecimiento infinito.
Fundada allá por el año 1908, esta querida escuela ha sido testigo del paso de muchas generaciones. Generaciones de niños y niñas que encontraron entre sus aulas no solo conocimiento, sino contención, valores y cariño.
A lo largo de su trayectoria, la Escuela 235 fue creciendo junto con el pueblo. En el año 2011, gracias al programa PROMEDU, su edificio fue completamente remodelado, incorporando nuevos espacios, comedor, cocina y mobiliario, reafirmando su rol como un verdadero faro educativo en la región.
Ubicada en el corazón de Yala, sobre el Pasaje Guernica, esta escuela pública de jornada completa sigue abriendo sus puertas todos los días para ofrecer educación inicial y primaria, con el esfuerzo de sus docentes, la cooperación de las familias y el acompañamiento de toda la comunidad.
Hoy es un día de fiesta. Es tiempo de recordar a quienes pasaron, a quienes dejaron su huella con tiza, cuaderno y corazón. Y es también tiempo de agradecer a quienes siguen apostando por una educación con raíces y alas.
Desde este micrófono, abrazamos con cariño a toda la comunidad educativa de la Escuela “Provincia de Chubut” en su aniversario número 116.
¡Feliz cumpleaños, querida escuela de Yala!
¡Gracias por ser parte de la historia viva de nuestro pueblo!
