
El hecho ocurrió en la noche del miércoles sobre la peatonal Belgrano, donde estos individuos se llevaron por la fuerza los productos de venta de trabajadores informales sin dejar acta de secuestro, ni mostrar identificación alguna.
Lo más grave del caso:
Los supuestos inspectores no exhibieron credenciales oficiales,
El procedimiento careció de documentación legal,
No entregaron actas de decomiso,
Y se retiraron del lugar en una camioneta 4×4 sin ningún tipo de identificación municipal.
¿Operativo trucho o abuso institucional?
Los damnificados, hartos del atropello, recurrieron a redes sociales y a la Seccional 1 del barrio Centro para denunciar este «operativo fantasma», que más parece un robo disfrazado de inspección.
Mientras tanto, crece la indignación en la comunidad, sobre todo porque si esto fue impulsado por el municipio, queda en evidencia una preocupante doble vara:
Por un lado, se criminaliza al emprendedor de a pie, que trabaja honestamente para sobrevivir.
Por el otro, se protege con un manto de impunidad a gigantes como la cadena de supermercados Comodín, responsable —según la causa judicial— de un incendio que se cobró cinco vidas, entre ellas la de una niña de apenas dos años, en el barrio Ciudad de Nieva.
Mientras los carros callejeros son secuestrados a la fuerza, Comodín sigue abierto, sin controles, sin seguridad, sin salidas de emergencia, y con locales en condiciones peligrosas. Todo esto, bajo la mirada cómplice del municipio capitalino, encabezado por el intendente imputado por corrupción, Raúl “Chuli” Jorge.
La pregunta que queda flotando:
¿Quién controla a los que se suponen deben controlar?
Y más importante aún:
¿Hasta cuándo se va a pisotear al que lucha para ganarse el pan con dignidad?
Desde Radio Yala 105.3, vamos a seguir informando sin miedo, como siempre: del lado del pueblo.