
El hecho ocurrió el domingo en las rutas provinciales 62 y 1, a la altura de Cayastá.
El vehículo, un Peugeot 504 blanco sin luces, fue interceptado por la patrulla urbana de la Unidad Regional VII. Al inspeccionar el interior, los agentes encontraron tres terneros en el asiento trasero, entre los ocupantes, y otros cinco ejemplares escondidos en el baúl.
Según informaron fuentes oficiales, los animales eran de pelaje overo, tipo Holando Argentino, y se presume que fueron sustraídos de algún establecimiento rural de la zona.

Los ocupantes del vehículo —tres hombres oriundos de la ciudad de Gálvez— fueron detenidos por presunto abigeato, mientras que la pequeña que viajaba con ellos resultó ser la hija de uno de los implicados.
La Fiscalía de turno ordenó la aprehensión de los adultos, además del secuestro del vehículo, los animales y los teléfonos celulares de los involucrados.
El insólito hecho causó sorpresa en la comunidad rural, donde el robo de ganado sigue siendo una problemática vigente. Las autoridades continúan investigando para determinar el origen de los terneros y si hay más personas involucradas.
